Biosurfactantes ecológicos y rentables derivados de residuos
El Fondo Europeo de Bioeconomía Circular (ECBF), Qbic III y Flanders Future Tech Fund (FFTF) han unido sus fuerzas para dar un impulso significativo a la empresa emergente AmphiStar, con sede en Gante. La ronda de financiación, dirigida por el ECBF, recaudó 6 millones de euros. Esto permitirá a AmphiStar acelerar la industrialización de su gama de biosurfactantes y reforzar su equipo. Para gestionar esta transición acelerada, Pierre-Franck Valentin se ha incorporado al equipo como Director General. Mientras AmphiStar se prepara para su pleno despliegue comercial, la empresa está sentando las bases de su futura expansión con planes para la construcción de una planta de lanzamiento de 1.000 toneladas (100% activas) al año.
Los tensioactivos desempeñan un papel fundamental como componentes funcionales en numerosos productos de nuestra vida cotidiana, desde champús a dentífricos, cosméticos, tintas, pinturas, productos agroquímicos, alimentos y piensos e incluso materiales de construcción. Cada año se producen más de 20 millones de toneladas de tensioactivos, la gran mayoría de los cuales dependen en gran medida de materias primas fósiles y/o de aceite de palma insostenibles y se producen mediante procesos de fabricación químicos tradicionales muy agresivos.
AmphiStar está revolucionando el mercado de los tensioactivos con la introducción de biosurfactantes microbianos producidos a partir de residuos de origen local y flujos secundarios de la industria agroalimentaria, como los residuos de alimentos de los supermercados. Estos innovadores biosurfactantes circulares no compiten con la producción de alimentos ni afectan directamente al uso del suelo. Además, para su producción se aplican procesos biológicos suaves y seguros similares a la elaboración de cerveza. AmphiStar ofrece una amplia cartera de glicolípidos biobasados, producidos biológicamente y biocompatibles, como los soforolípidos, a los propietarios de marcas de productos de limpieza y cosméticos que buscan alternativas realmente sostenibles, de alto rendimiento y asequibles. Estos biosurfactantes se presentan en diversas formas y purezas, y sirven como sustitutos perfectos de las fórmulas existentes, al tiempo que reducen significativamente la huella de carbono de los productos acabados. Esto es sólo el principio, ya que los biosurfactantes de AmphiStars tienen el potencial de utilizarse en muchos mercados y aplicaciones diferentes que utilizan tensioactivos, revolucionando así todo un sector.
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Fuente: quimica.es