La celulosa podría sustituir a los plásticos en la electrónica flexible
Los productos electrónicos delgados, desde teléfonos móviles hasta paneles solares, están hechos de plástico, lo que genera un grave problema de sostenibilidad, y su fabricación a menudo requiere productos químicos potencialmente tóxicos, como hexano y tolueno. Para “verde” la industria de la electrónica flexible, un equipo de investigadores en Italia está recurriendo a un material familiar de origen vegetal para inspirar una nueva generación de materiales funcionales con aplicaciones en wearables, sensores biomédicos y electrónica comestible.
Según Luca Maiolo, investigador del Instituto del Consejo Nacional de Investigación en Microelectrónica y Microsistemas de Italia, y sus colegas Elena Palmieri y Francesco Maita, la celulosa, el componente principal de las paredes celulares de las plantas, puede tener la combinación adecuada de propiedades para actuar como alternativa a los plásticos convencionales. En un artículo publicado en Advanced Materials Technologies, el equipo describe un nuevo método para utilizar derivados de la celulosa para crear sustratos adecuados para la futura electrónica flexible y sostenible.
La celulosa está formada por largas cadenas de azúcares y es un compuesto estructural en las plantas. Los derivados de la celulosa son moléculas que resultan del procesamiento, dando como resultado celulosa con diferentes grupos químicos, como la metilcelulosa o el acetato de celulosa. Estos derivados ya se utilizan en muchos productos, y Maiolo y su equipo plantearon la hipótesis de que dos derivados, la etilcelulosa y la hidroxipropilcelulosa, podrían servir como sustratos adecuados que podrían fabricarse sin productos químicos nocivos.
La etilcelulosa es extremadamente hidrófoba, lo que significa que no se mezcla con agua, lo que la hace potencialmente resistente a daños durante el proceso de fabricación de productos químicos y para uso en exteriores, como en la agricultura de precisión. La hidroxipropilcelulosa, por otro lado, es hidrófila (se mezcla bien con agua) y se adapta a ciertas técnicas de impresión y a la producción de películas delgadas.
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Fuente: advancedsciencenews.com